Ayer, como cada año desde 1982, la comunidad laborante del Comité de Familiares de Detenidos-Desaparecidos en Honduras (COFADEH) participó en la movilización de las y los trabajadores, para honrar en las calles la memoria de nuestros seres queridos revolucionarios.
Hoy, en este plantón del primer viernes de mayo, hacemos homenaje a todas las mujeres y hombres que ofrendaron su libertad y su vida para la liberación de la conciencia nacional frente a los opresores esclavistas, neoliberales, que entregaron la Patria a los invasores.
Cada uno de nuestros seres queridos heredó el mandato de lucha por la dignidad del pueblo frente a las 10 familias árabes-palestinas que negociaron la ocupación militar del territorio en 1980, la devaluación de la moneda en 1990, el golpe de Estado en 2009 y la adopción del modelo narco en 2013.
Con esta versión de la historia hacemos nuestro el slogan de la jornada conmemorativa del primero de mayo en 2025: “Clase trabajadora, vanguardia de la revolución”, que impulsa a Honduras a una etapa superior de lucha política contra el familión beduino que tiene su propia lista de cadáveres en sus armarios.
Con todo el derecho que nos confieren las calles demandamos en consecuencia a nuestros amigos, compañeros y camaradas del gobierno, el partido Libre y las centrales obreras, que atiendan las demandas y propuestas contenidas en el planteamiento unificado divulgado ayer jueves 1 de mayo.
El planteamiento, entregado a la candidata presidencial Rixi Moncada y enviado a la presidenta Xiomara Castro a través de su asesor político principal, Manuel Zelaya, contiene acciones posibles, factibles y viables con el apoyo popular.
La conformación de una Comisión de la Verdad que conduzca sin dilaciones a la identificación y detención de los autores intelectuales de los crímenes de Isy Obed Murillo, Berta Cáceres, Juan López y Margarita Murillo, así como la acción penal contra otros violadores de derechos humanos impunes.
La captura inmediata de Romeo Vásquez y Roberto Micheleti, prófugos culpables directos del crimen del golpe de Estado, financiado por las petroleras estadounidenses y gerenciado por el Comando Sur que estrecha actualmente nuevas relaciones militares desde Palmerola.
La discusión y aprobación de la Ley de Cumplimiento de Obligaciones Internacionales con las Víctimas de la Doctrina de Seguridad Nacional es un imperativo ético en la Asamblea Legislativa, que se comprometió a no dilatar esta deuda histórica del Estado con los principios de la justicia transicional.
Desde Cofadeh ofrecemos, una vez más, nuestro acompañamiento a las bancadas que han expresado su voluntad de alinear sus principios y valores con esta demanda de las víctimas sobrevivientes de aquel proyecto de muerte impuesto por Estados Unidos a Honduras.
Expresamos nuestra voluntad de asistir a elecciones libres, limpias, seguras y participativas, rechazando con firmeza las intenciones de la oligarquía corrupta de impedir su realización a través de cualquier argucia incluyendo el expediente nefasto de un nuevo golpe de Estado.
Con la fuerza de los mártires, juramos nunca callar nuestro grito de exigencia de verdad y justicia. De los hechos y de los hechores, ni olvido ni perdón.
COFADEH
Tegucigalpa, M.D.C., 2 de mayo de 2025