Sobreseimiento provisional y medidas sustantivas para estudiantes criminalizados

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2024

Tegucigalpa, Honduras.- Tres estudiantes universitarios recibieron sobreseimiento provisional y dos mantienen medidas sustitutivas a la prisión por los delitos de daños e incendio, informó el equipo de defensa legal, al finalizar la Audiencia Inicial, este jueves 25 de febrero.

Esa es la decisión del Juez de Letras de lo Penal de Tegucigalpa, quién conoció el caso por el que, al final acusaban de seis delitos a Alex Mauricio Laguna Banegas (19 años), Eduardo José Molina (22 años), Josué Rafael Fonseca Rojas (27 años), Joel Edgardo Rojas (29 años) y Christopher Flores (35 años).

Los cinco estudiantes fueron sobreseídos por los delitos de lesiones, atentados, manifestaciones ilicitas y desorden público, ya que el Ministerio Público no pudo sostener la acusación; Sin embargo, decretó auto de prisión por los delitos de daño e incendio agravado a Joel Rojas y Eduardo Molina.

El equipo de defensa integrado por Karol Cárdenas abogada del Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH) y Alejandro Mairena abogado del Centro de Investigación y Promoción de los Derechos Humanos (CIPRODEH), no comparte la decisión del juez en cuanto a decretar prisión preventiva ya que no puede haber incendio porque no se puso en peligro la vida de una persona, si hubo un daño que fue dirigido a una motocicleta como lo manifestó un perito del Ministerio Público.

Sí reconocemos que hubo un daño a un bien -declaró Cárdenas-  el cuál sucedió cuando ya la manifestación había terminado. Pero no se comprobó qué ocasionó ese daño. Así mismo, la motocicleta tenía un orificio de arma de fuego, la cual no fue puesta a orden del Juzgado, no consta ninguna pericia.

Entonces, si esa arma fue la que ocasionó el daño a la motocicleta ¿Por qué el Ministerio Público insiste en acusar a nuestros representados? Cuándo no hay ni un tan sólo decomiso de algún objeto relacionado a los hechos, que se le haya decomisado a los cinco estudiantes, añadió la abogada.

Eduardo Molina y Joel Rojas, cumplirán medidas sustitutivas a la prisión de firmar en el Juzgado, no salir del país y estar bajo cuidado y vigilancia de sus padres, como debió ser desde el principio, pero se dio la custodia al COFADEH por las últimas dos semanas, declaró Cárdenas.

Alex Mauricio Laguna Banegas, Josué Rafael Fonseca Rojas y Christopher Flores, fueron sobreseídos provisionalmente de los seis delitos. Esto significa que el proceso queda abierto por cinco años.

IMG-20210224-WA0010Alejandro Mairena, explicó que el sobreseimiento provisional es una decisión que se toma cuando pudiera existir alguna duda y el Ministerio Público tiene otra oportunidad de hasta cinco años para seguir las investigaciones o darse algun hecho que no se conocía, y mantiene sometidos a los jóvenes y de haber reincidecia [según el MP] les pueden aplicar medidas distintas.

Los estudiantes universitarios fueron capturados el 10 de febrero, amenazados y torturados por elementos de la Policía Nacional, durante toda la noche en la Unidad Metropolitana de Policía #1 conocida como Core-7, y en la madrugada del viernes 12 fueron llevados a la oficina de la institución defensora de derechos humanos, como lo determinó el juez de turno.

Hoy volveran a sus hogares después dos semanas de permanecer en el COFADEH, a donde los visitaba sus familias y compañeros. Además, se les brindó atención médica y sicológica.

Al finalizar el segundo día de Audiencia Inicial, las madres y padres de Joel Rojas y Eduardo Molina, junto a los estudiantes y las defensoras Karol Cárdenas y Dora Oliva, se presentaron ante el juez Plinio Consuegra, para firmar una acta de compromiso, ellos fueron convocados para las 2:00 p.m.

Y las 4:00 p.m. ingresaron al Juzgado  de Letras: Alex Laguna, Rafael Fonseca y Cristopher Flores, acompañados de la abogada Oliva, donde el Juez N° 7.

Los criminalizados participaban de una jornada cultural convocada por estudiantes universitarias feministas para exigir justicia para Keyla Martínez Rodríguez, víctima de homicidio bajo custodia policial en La Esperanza, Intibucá, el domingo 7 de febrero.